lunes, 3 de julio de 2017

El primer voto de la mujer mexicana.


Hoy se conmemora el primer voto de la mujer mexicana.

Fue el 3 de julio de 1955 que se le permitió a la mujer en México votar por primera vez en elecciones federales, antes de eso la mujer fue considerada ni siquiera una ciudadana se segunda clase, simplemente no era ciudadana sino "una cosa" de la que podía decidirse sobre sus ausentes derechos políticos.

Las mujeres al paso del tiempo hemos luchado por no solo votar y decidir sobre el destino político de nuestro país, sino en ganar espacios para ejercer el poder desde una curul como legisladora, como edil en el espacio municipal, estatal y federal, pero aún no hemos alcanzado el respaldo ciudadano para que se nos permita dirigir el país como Presidenta de la República, aunque hemos sido bien representadas por mujeres preparadas no se ha construído lo suficiente para que el pensamiento del mexicano deposite su confianza en una mujer.

Rosario Ibarra Piedra fue la primer mujer en México en buscar la Presidencia de la República en 1982 por el Partido Revolucionario de los Trabajadores el PRT, solo obtuvo entonces el 1.76 por ciento de la votación.

Marcela Lombardo Otero representó en 1994 al Partido Popular Socialista el PPS y solo alcanzó el 0.47 por ciento de los votos.

Ese mismo año la representante del Partido del Trabajo Cecilia Soto González obtuvo el 2.75 por ciento de los votos nacionales.

No se tuvo otra candidata a la Presidencia de la República hasta el 2006 con Patricia Mercado Castro representante del Partido Altenativa Socialdemócrata y Campesina el PASD, quien logró obtener el 2.7 por ciento de los votos en la elección.

En el 2012 la panista Josefina Vázquez Mota logró históricamente el 25.4 por ciento de los votos en busca de la Presidencia de la República.

La lucha de las mujeres mexicanas por representarnos desde el poder ha avanzado gracias a la llamada paridad de género 50-50 en los congresos, pero el reconocimiento propio de la capacidad femenina de gobernar sigue siendo cuestionada.

Pese a que las mujeres somos más de la mitad de la población en México de acuerdo al INEGI y que nuestro voto puede entonces decidir el destino político de nuestro país, seguimos siendo usadas como "acarreo político" para engrosar los mítines y los programas paternalistas que dan votos a políticos oportunistas.

Hay mucho por conmemorar, pero también mucho por continuar en la lucha de nuestros derechos políticos.


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